Nerea Melgosa

Uno de mis principales retos ha sido transmitir y comunicar a mis hijos y familiares lo que han recibido de las personas comprometidas con la sociedad. Ese ejemplo de compromiso me impulsó a incorporarme a proyectos sociales a favor de Vitoria-Gasteiz, Álava y Euskadi. Ayudar, proteger y cuidar a las personas han sido el eje central y el objetivo principal de mi trayectoria personal y profesional, el logro del bienestar real.

Me he formado en el área de la sociología. En mis más de 30 años de carrera profesional he trabajado en infinidad de lugares, tanto en el sector público como en el sector privado. Y para colaborar en todos, he mostrado mi deseo de escuchar los deseos, reivindicaciones y sugerencias del compañero de al lado.

Mi convicción por un nacionalismo comprometido con la justicia social, un nacionalismo culto, ilustrado y euskaltzale me empujaron a afiliarse al Partido Nacionalista Vasco en 1999 en la Organización Municipal de Lakua. Desde entonces he tenido responsabilidades institucionales en el Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz, como concejala; en Diputación Foral de Álava, como directora de Igualdad y, en la actualidad, en el Gobierno Vasco como consejera de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales.

¿Mis pasiones? En primer lugar, mi familia, sobre todo mis hijos. Ellos son mis faros. Cultura en el sentido más amplio, pero me encanta la literatura, la música y la fotografía. El café solo y el chocolate negro... me apasionan. Necesito el deporte para mantenerme y sentirme sana... Y Álava, y Vitoria me ofrecen los rincones más fascinantes y los espacios más cómodos para practicar deporte.

Aunque tenga problemas para expresarse correctamente en euskera, soy una vascófila empedernida y cada día me esfuerzo por utilizar nuestro idioma más y mejor. Igual que con el euskera, con el futuro de este país: juntos, dispuestos siempre a conseguir más y mejor colaborando.

Quiero seguir aportando y apostando por una Euskadi mejor y para más gente. Tengo muy presente el pasado y el día a día pero, sobre todo, siempre con la esperanza de alcanzar un futuro mejor.