Soy Naroa Atxurra Lasfuentes y nací en Muskiz en 1988. Desde joven aprendí de la importancia del compromiso con los demás y eso me ha marcado. Siempre me he sentido a gusto comprometiéndome con el entorno que me rodeaba y con las personas que habitan en él. Puede que fuera eso lo que me guio a la hora de convertirme en militante social y política, activismo que llevo más de veinte años desempeñando.
Es mi manera de ver la vida: desde lo que soy, ser útil al bien común. Por eso creo en el servicio público; lo veo como la herramienta que nos permite lograr el bienestar de la sociedad en todos sus aspectos.
Ese pulso interior también dirigió mi vida académica. Tras mis años de escolarización, me gradué en Psicología, para posteriormente cursar un máster universitario en Psicología de la Intervención Social. También cursé el grado de Ciencias Políticas y de la Administración y, en cuanto a los idiomas, domino el euskera, el castellano y el inglés.
Me considero una persona responsable, discreta, leal, comprometida y rigurosa. Cualidades que me han servido en momentos de tensión y toma de decisiones. Durante el tiempo que trabajé como asistente técnico del Grupo Vasco en el Congreso, aprendí la importancia de saber escuchar activamente a las y los representantes de otros partidos políticos, la importancia de manejar los tiempos, a tener claro constantemente el por qué hacemos lo que hacemos, y a no dejarme llevar por la presión o expectativas de terceros. Debido a la transversalidad necesaria en el desempeño de mis actuales funciones en la empresa privada, he podido poner en práctica otras habilidades como la coordinación de equipos, la gestión y alineamiento de diferentes intereses, el seguimiento de objetivos y el trabajo por proyectos, con plazos y presupuestos. En este sentido, además de entre personas, la relación con otras organizaciones, tanto privadas como de gestión pública, me parece necesaria.
No recuerdo un momento en el que la política no haya estado ahí; he crecido militando en política desde que tengo uso de razón. Entre mis referentes políticos se encuentran mi amama Bego, la primera concejala de Abanto y Zierbena (1979), una más de aquella generación de mujeres comprometidas con su País que nos abrieron el camino a las que venimos por detrás; su carácter emprendedor, y su militancia social y política sigue siendo hoy en día referente para mí. Durante mi infancia y adolescencia tuve la suerte de conocer y vivir de primera mano lo que significa la responsabilidad y el orgullo de ser un cargo público, ya que Gualber Atxurra, quien fuera concejal y alcalde de Muskiz, es mi aita.
Entre mis pasatiempos se encuentran viajar, pintar y disfrutar de la música… Todas ellas me protegen de uno de los narcóticos más nocivos de la vida: la rutina. Siempre vuelvo a la playa de La Arena, testigo de momentos felices en mi vida y, lo que más me hace sonreír es ver a mis hijos Luken y Maren reír y jugar juntos.
Veo el servicio público como herramienta para lograr el bienestar de la sociedad.